Ya vuelvo a estar aquí, con retraso, eso sí, pero activa por fin. Como siempre por estas fechas voy con una entrada larguísima, de mi etiqueta celebraciones. Voy con retraso, pero me apetecía poner lo que comimos el día de Reyes, siempre hay celebraciones, y siempre parece que nos faltan ideas.
Si queréis acceder a cualquier receta, clicad en el título, os llevará a la entrada con la receta original, con más fotos y más explicaciones.
Los próximos días pondré en entradas independientes las recetas del jamón de pato, las tostas de langostinos, las navajas en salsa y el pollastre rostit. Son recetas nuevas que merecen estar en una entrada independiente. Hoy pongo sólo las recetas de lo que ya he publicado anteriormente en el blog, y poco a poco, conforme vaya redactando las siguientes entradas, completaré ésta con la totalidad de las recetas.
INGREDIENTES (2 personas)
Una bolsa de lechugas variadas
Un puñado de pasas remojadas
1 rodaja de queso de cabra en rulo
Un paquete de 100 gr. de panceta
Un puñado de nueces
VINAGRETA
Aceite de oliva vírgen extra
Vinagre de módena
Mostaza
Sal
Mostaza
Sal
ELABORACIÓN
Disponer en un bol la mezcla de lechugas.
Dejar en remojo las pasas.
Saltear la panceta.
Poner por encima de la lechuga el resto de ingredientes,y aliñar.
2- JAMÓN + QUESO IDIAZÁBAL
INGREDIENTES (4 personas)
½ Pimiento rojo
½ Pimiento verde
1 Cebolla
250 gr. langostinos cocidos
100 gr. de gambas cocidas
120 gr. pulpo cocido
150 gr. Mejillones cocidos
9 palitos de cangrejo
Aceite
Vinagre
Sal
1 hoja de laurel
ELABORACIÓN TRADICIONAL:
Para cocer los mejillones: ponerlos a remojo previamente en abundante agua con sal
Ponerlos en una cazuela con un fondo de vino blanco, y taparlos. Dejar en el fuego hasta que abran y reservar.
Para cocer los langostinos y las gambas: No hace falta descongelarlos previamente. Poner a hervir abundante agua, sal y una hoja de laurel. La cantidad de sal a añadir será de 50/60 gr. por litro de agua, teniendo en cuenta que una cucharada sopera de sal (rasa) pesa 15 gr.
Cuando el agua hierva introduciremos el marisco congelado.
Retiramos el marisco cuando el agua vuelve a hervir y lo sumergiremos en salmuera (agua fría con sal) hasta que se enfríe completamente.
Para cocer el pulpo: El pulpo puede ser congelado o fresco. En el primer caso no es necesario mazarlo, pero si es fresco el secreto para que esté tierno consiste en golpearlo antes de cocerlo.
Poner a cocer en una cazuela abundante agua con sal. Cuando comience a hervir, introducir el pulpo en la cazuela y levantarlo dos o tres veces (lo que popularmente se llama 'asustar' el pulpo) y dejarlo definitivamente dentro. Dejarlo cocer entre 20 y 30 minutos, pincharlo y, cuando esté blando, retirarlo del fuego.
Una vez tenemos todos los ingredientes cocidos, los troceamos, al igual que los pimientos, la cebolla y los palitos de cangrejo. Mezclamos en un bol y aliñamos con el aceite, el vinagre y la sal.
7- POLLASTRE ROSTIT
INGREDIENTES
Para el azúcar glas aromatizado120 gr de azúcar glas
La piel de medio limón —solo la parte amarilla—
La piel de media naranja —solo la parte naranja—
La piel de medio limón —solo la parte amarilla—
La piel de media naranja —solo la parte naranja—
Para preparar la masa madre
70 gr de leche entera
10 gr de levadura fresca de panadería
1 cucharadita de azúcar
130 gr de harina de fuerza
70 gr de leche entera
10 gr de levadura fresca de panadería
1 cucharadita de azúcar
130 gr de harina de fuerza
Para la masa
60 gr de leche entera
70 gr de mantequilla a temperatura ambiente
2 huevos
20 gr de levadura fresca de panadería
25 gr de agua de azahar —al gusto—
450 gr de harina de fuerza
1 pellizco de sal
Los 120 gr de azúcar glas que habremos aromatizado con el limón y la naranja
60 gr de leche entera
70 gr de mantequilla a temperatura ambiente
2 huevos
20 gr de levadura fresca de panadería
25 gr de agua de azahar —al gusto—
450 gr de harina de fuerza
1 pellizco de sal
Los 120 gr de azúcar glas que habremos aromatizado con el limón y la naranja
Para la decoración
Huevo batido
Azúcar humedecido con unas gotas de agua Almendras laminadas
Naranjas confitadas
Guindas en almíbar
Huevo batido
Azúcar humedecido con unas gotas de agua Almendras laminadas
Naranjas confitadas
Guindas en almíbar
ELABORACIÓN EN THERMOMIX
Con el vaso y las cuchillas muy secos pulverizar el azúcar 30 segundos a velocidad progresiva 5/7/10.
Añadir las pieles de limón y naranja a través de la boca y programar 15 segundos a velocidad progresiva 5/7/10. Retirar y reservar.
Poner todos los ingredientes de la masa madre dentro del vaso y programar 15 segundos a velocidad 4. Retirar del vaso y formar una bola sobre la encimera. Introducir en un bol y cubrir con agua templada. Cuando la bola de masa flote y doble su volumen, estará lista —de diez a quince minutos—.
Poner en el vaso el azúcar glas aromatizado que habíamos reservado, los ingredientes de la masa, y por último, la masa madre. Programar 30 segundos a velocidad 6.
Amasar 3 minutos a velocidad espiga. La masa se moverá formando una bola. Dejar reposar dentro del vaso, envolviendo éste en una toalla, hasta que la masa salga por la boca —aproximadamente unas 5 horas—.
Bajar la masa con la espátula y volver a amasar dentro del vaso 1 minuto a velocidad espiga.
Retirar la masa del vaso con las manos embadurnadas de aceite y ponerla sobre una superficie aceitada. Dividirla en dos —salvo que prefiráis hacer un solo roscón grande— y darles forma de bola alisándolas bien con las manos.
A continuación darles la forma de roscón. Para ello, introducir los dedos en el centro e ir agrandando el agujero. Si la masa tiende a encogerse, es que no está bien relajada: dejarla reposar otros diez minutos y se manejará mejor. Una vez dada la forma, colocar sobre una bandeja de horno en la que habremos puesto papel de hornear.
Dejar reposar hasta que doblen su volumen. Este levado es más corto, unas dos horas.
Pintar con huevo batido, muy suavemente, sin pinchar el roscón, y adornar con azúcar humedecido con unas gotas de agua y frutas confitadas.
Precalentar el horno a 200°, calor arriba y abajo.
Hornear entre 15 y 18 minutos, y bajar la temperatura a 180° los últimos 10 minutos de cocción —si vemos que se tuesta demasiado, poner un papel de aluminio por encima—.
Dejar reposar sobre una rejilla, y cuando esté frío, rellenar al gusto o comer directamente.
Poner todos los ingredientes de la masa madre dentro del vaso y programar 15 segundos a velocidad 4. Retirar del vaso y formar una bola sobre la encimera. Introducir en un bol y cubrir con agua templada. Cuando la bola de masa flote y doble su volumen, estará lista —de diez a quince minutos—.
Poner en el vaso el azúcar glas aromatizado que habíamos reservado, los ingredientes de la masa, y por último, la masa madre. Programar 30 segundos a velocidad 6.
Amasar 3 minutos a velocidad espiga. La masa se moverá formando una bola. Dejar reposar dentro del vaso, envolviendo éste en una toalla, hasta que la masa salga por la boca —aproximadamente unas 5 horas—.
Bajar la masa con la espátula y volver a amasar dentro del vaso 1 minuto a velocidad espiga.
Retirar la masa del vaso con las manos embadurnadas de aceite y ponerla sobre una superficie aceitada. Dividirla en dos —salvo que prefiráis hacer un solo roscón grande— y darles forma de bola alisándolas bien con las manos.
A continuación darles la forma de roscón. Para ello, introducir los dedos en el centro e ir agrandando el agujero. Si la masa tiende a encogerse, es que no está bien relajada: dejarla reposar otros diez minutos y se manejará mejor. Una vez dada la forma, colocar sobre una bandeja de horno en la que habremos puesto papel de hornear.
Dejar reposar hasta que doblen su volumen. Este levado es más corto, unas dos horas.
Pintar con huevo batido, muy suavemente, sin pinchar el roscón, y adornar con azúcar humedecido con unas gotas de agua y frutas confitadas.
Precalentar el horno a 200°, calor arriba y abajo.
Hornear entre 15 y 18 minutos, y bajar la temperatura a 180° los últimos 10 minutos de cocción —si vemos que se tuesta demasiado, poner un papel de aluminio por encima—.
Dejar reposar sobre una rejilla, y cuando esté frío, rellenar al gusto o comer directamente.
ELABORACIÓN TRADICIONAL
La masa madre
Templar la leche y deshacer la levadura en ella. Mezclar con el resto de los ingredientes y formar una bola.
Poner un bol con agua templada y meter la bola de masa madre en él. Cuando flote, en aproximadamente 10 minutos, estará lista para utilizar con la masa principal.
Templar la leche y deshacer la levadura en ella. Mezclar con el resto de los ingredientes y formar una bola.
Poner un bol con agua templada y meter la bola de masa madre en él. Cuando flote, en aproximadamente 10 minutos, estará lista para utilizar con la masa principal.
La masa principal
Mezclar la levadura desmenuzada con la leche tibia para su fermentación.
Tamizar la harina en un bol con la ayuda de un colador.
Una vez tamizada, añadir los huevos, el azúcar y la mantequilla, una pizca de sal y el agua de azahar, junto con la ralladura de medio limón y de media naranja y la masa madre.
Mezclar todo de una manera enérgica. Si tenéis una batidora con ganchos para amasar os vendrá muy bien; si no, a mano.
Poner la mezcla sobre la mesa de trabajo, en la que previamente hemos puesto un poco de aceite para evitar que se nos pegue. Comenzar a amasar con las manos aceitadas.
Cuando haya quedado la mezcla elástica, apiñarla en una bola y dejar que aumente su tamaño —cinco horas como mínimo—.
Una vez que la masa ha duplicado su volumen, dividirla en dos —salvo que prefiráis hacer uno grande— y darles forma de bola. Dejar reposar las bolas cinco minutos.
A continuación darles la forma de roscón. Para ello, introducir los dedos en el centro e ir agrandando el agujero. Si la masa tiende a encogerse, es que no está bien relajada: dejarla reposar otros diez minutos y se manejará mejor. Una vez dada la forma, colocar sobre una bandeja de horno en la que habremos puesto papel de hornear.
Dejar reposar hasta que doblen su volumen. Este levado es más corto, unas dos horas.
Pintar con huevo batido, muy suavemente, sin pinchar el roscón, y adornar con azúcar humedecido con unas gotas de agua y frutas confitadas.
Precalentar el horno a 200°, calor arriba y abajo.
Hornear entre 15 y 18 minutos, y bajar la temperatura a 180° los últimos 10 minutos de cocción —si vemos que se tuesta demasiado, poner un papel de aluminio por encima—.
Dejar reposar sobre una rejilla, y cuando esté frío, rellenar al gusto o comer directamente.
Mezclar la levadura desmenuzada con la leche tibia para su fermentación.
Tamizar la harina en un bol con la ayuda de un colador.
Una vez tamizada, añadir los huevos, el azúcar y la mantequilla, una pizca de sal y el agua de azahar, junto con la ralladura de medio limón y de media naranja y la masa madre.
Mezclar todo de una manera enérgica. Si tenéis una batidora con ganchos para amasar os vendrá muy bien; si no, a mano.
Poner la mezcla sobre la mesa de trabajo, en la que previamente hemos puesto un poco de aceite para evitar que se nos pegue. Comenzar a amasar con las manos aceitadas.
Cuando haya quedado la mezcla elástica, apiñarla en una bola y dejar que aumente su tamaño —cinco horas como mínimo—.
Una vez que la masa ha duplicado su volumen, dividirla en dos —salvo que prefiráis hacer uno grande— y darles forma de bola. Dejar reposar las bolas cinco minutos.
A continuación darles la forma de roscón. Para ello, introducir los dedos en el centro e ir agrandando el agujero. Si la masa tiende a encogerse, es que no está bien relajada: dejarla reposar otros diez minutos y se manejará mejor. Una vez dada la forma, colocar sobre una bandeja de horno en la que habremos puesto papel de hornear.
Dejar reposar hasta que doblen su volumen. Este levado es más corto, unas dos horas.
Pintar con huevo batido, muy suavemente, sin pinchar el roscón, y adornar con azúcar humedecido con unas gotas de agua y frutas confitadas.
Precalentar el horno a 200°, calor arriba y abajo.
Hornear entre 15 y 18 minutos, y bajar la temperatura a 180° los últimos 10 minutos de cocción —si vemos que se tuesta demasiado, poner un papel de aluminio por encima—.
Dejar reposar sobre una rejilla, y cuando esté frío, rellenar al gusto o comer directamente.
Menudo festín, como el día merece.
ResponderEliminarFeliz año
Besos
Ya por fin al ataque!!! jaja!
ResponderEliminarVaya festines os pegais en casa, no? Estoy deseando ver la recetuqui del pollastre, en apariencia se parece muchisimo a uno que hace mi madre! :)
Besines
Ummm que rico todo!! la boca agua se me ha hecho!
ResponderEliminar*El rincon de Pris*
q propuestas mas deliciosas. me encanta todo lo q has preparado.
ResponderEliminarCharo!!!! que empiezo yo con una triste pero rica ensalada y tu me vienes con esta maravilla,
ResponderEliminarpor favor no me pongas estas cosas delante de los ojos, que soy de carne y hueso y quiero
portarme bien aunque solo sea unos días.....jejejeejjej que ricura por Dios. Besossss.
Todos los platos que has puesto se apetecen mucho, me ha entrado hambre al verlos y diría si a todos ellos porque no puedo elegir solo uno.
ResponderEliminarBesos.
Madre mia Charo que lujazo de comida!!!
ResponderEliminarTodo está super apetecible y el roscón parece de pastelería, veo que has despedido las fiestas por todo lo alto.
Besos
Una comida super apetitiosa.............me encanta todo.
ResponderEliminarBesitos.
Lo de comida de reyes por qué es?? por ser del dia de los reyes magos o porque es para comer reyes. Porque menudo festin.
ResponderEliminarBesines
Me quedo loca viendo cada una de las imágenes, qué rico todo !!! Pero qué bien se come en tu casa;)
ResponderEliminarQue tengas un feliz 2014 y sobre todo, que sigamos compartiendo nuestras recetas:))) BESOS
Definitivamente! me traslado a vivir a tu casa.. quixa!! con lo que a mi me gusta comer! todo divino, menudo festín. un bso
ResponderEliminarVaya menú de lujo, Charo! Me encanta todo. Un beso!
ResponderEliminarMe encanta todo.... y quedo a la espera de ese pollastre, ¡qué pinta!.
ResponderEliminarUn besote.
ResponderEliminarBuenos días Charo. Ha esto si que se le puede llamar una buena y completa comida de Reyes. Esta todo espectacular lo que no me imagino es como después de todas estas exquisiteces, pudisteis comer un trozo de este magnifico roscón, para poner broche a la comida.
Un beso Paco