-Debemos dejar orear la panceta en un lugar fresco y seco durante 24 horas. Si vivís en zona húmeda, como yo, la dejaremos orear durante día y medio. Con esto conseguimos que la corteza se seque y que al cocinarla nos quede crujiente.
-Debemos cortar rodajas de panceta de dedo y medio de grosor. Con esto conseguimos que la carne quede bien tierna.
En la explicación de la receta os iré dando más trucos. Como digo, es una receta muy sencilla pero que necesita de práctica. Pensemos en una tortilla de patatas por ejemplo, no tiene misterio pero también tiene su "aquel".INGREDIENTES:
1 panceta de cerdo adobada
Aceite
de oliva
ELABORACIÓN:
En
primer lugar, debemos dejar orear (secar la panceta). La colgaremos en un sitio
seco y fresco, durante 24 horas. Si vivimos en un lugar húmedo, la dejaremos
orear día y medio o dos días. Con esto conseguiremos que la corteza se seque y
que después, al cocinarla, nos quede bien crujiente y nada chiclosa.
Una
vez ya hemos oreado la panceta, la cortaremos en rodajas de dedo y medio de
grosor (2 cm aproximadamente). En una sartén o cacerola baja ponemos aceite,
sólo para cubrir el fondo, y a continuación ponemos la panceta con la corteza
tocando la sarten. Para que no se nos caigan las rodajas pondremos cada rodaja
a continuación de la otra, para que se apoyen entre ellas y no se caigan.
A
fuego bajo (en mi caso en una inducción del 1 al 9, la puse al cuatro y medio),
dejamos cocinar la corteza durante 30-45 minutos o hasta que salgan burbujas en
la corteza.
Una
vez la corteza ya esté bien crujiente, sacamos las rodajas de panceta a un
plato, ya que ahora endremos que cocinarlas “tumbadas” (es decir, planas) y no nos van a caber todas de golpe en la
sarten. Subimos el fuego, en mi caso al 7,5-8, y por tandas, vamos colocando
rodajas de panceta en la sartén, las que nos quepan, y las cocinamos durante 10
minutos por cada lado, hasta que el exterior esté dorado pero el interior
tierno.
Una
vez cocinadas, las pasamos a un plato con papel de cocina, para que absorban el
exceso de grasa.
Los
torreznos se pueden comer calientes o fríos. A mi personalmente como más me
gustan es templados. Es importante saber que se deben comer en el día, ya que
con el paso del tiempo la corteza pierde su crujiente.
Mira que quedan ricos estos torreznos!! En casa nos encantan!! Te han quedado fantásticos!! Bs.
ResponderEliminarbuah, riquísimos
ResponderEliminarCon moderación?? Blasfemia!
ResponderEliminarCharo , nunca los hice y estos tuyos se ven de escandalo , que buenos
ResponderEliminarbesinos
Que ricos Charo, me encantan los torreznos, pero no he conseguido que me queden bien en casa.
ResponderEliminarBesoss
jo torreznos.... que ricos por favor!!, me dan un ardor y una pesadez tremenda, pero que buenos están jajajajaj, lo dificil es la moderación jjjajaaja , porque mientras los comes entran como el agua, lo malo es despues jajaja
ResponderEliminarbuenisimos!
RIQUISIMOS!!!!
ResponderEliminarUn abrazo.
Que pintaza tienen, me encantan Charo, besos
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